lunes, 25 de octubre de 2010

Haiku con los brazos extendidos

(Con audio en la voz del autor)


A todos mis amigos. A todos cuantos quiero...


Photobucket


¡Salta al vacío

con los ojos abiertos:

aquí te espero!


(Active si desea escuchar este poema en la voz de su autor. Puede apagar el sonido del blog si éste interfiere con su audición)


Photobucket

Photobucket

15 comentarios:

  1. Aunque hubieses escrito:

    Salta al vacío
    con los ojos cerrados
    aquí te espero


    de igual modo saltaría, amigo mío.
    Claro, yo llevo escoba...jajaja...
    Es broma, tú abre los brazos que yo me lanzooooooooooo...

    BESAZAZOS!!!

    ResponderEliminar
  2. Si es mi poeta el que espera no lo dudaría ni un segundo.

    Últimamente, entre unas cosas y otras, no he tenido tiempo de atender mi blog todo lo que me hubiera gustado. No he tenido tiempo ni para escribir, pero siempre que entro me paso por tu isla, te he echado de menos y me alegra comprobar que sigue creciendo cada vez más bonita. Esta preciosa.

    Te he echado de menos, pero espero que a partir de ahora, pueda pasarme más a menudo. He andado liada con un mundo de fantasía que estamos creando para un juego de rol. Y me ha ocupado demasiado tiempo, además la recuperación es más lenta de lo que esperaba. Pero sigo ahí, luchando por alcanzar algún día la costa de una isla en la que me espera el mejor de los amigos.

    Un besazo mi dulce poeta y todo mi cariño, desde el corazón de tu musa.

    ResponderEliminar
  3. Yo salto:

    Ignora el vértigo,
    que le den a la muerte,
    ven a mis brazos.

    ResponderEliminar
  4. ¡Ay, mi Pedrito, que ha estado muy pachucho él! ¡Je,je,je! Espero ya estés sano como un roble, que no me entere yo de lo contrario. ;) Eso de saltar al vacío tiene su aquel y no son pocas las veces que lo hacemos a lo largo de la vida. A mí, de momento, siempre me ha merecido la pena, pero es que hasta para saltar al vacío hay que tomar precauciones y hacerlo con alguna que otra cautela, si no el batacazo está asegurado.

    ResponderEliminar
  5. "Con los ojos abiertos" Que es igual que decir: Sin miedo.
    Si es el amor el que espera, bien se puede saltar con los ojos abiertos o cerrados. El amor siempre te cobija, aún en el vacio.
    Me he enterado que ahs estado pachucho, espero y confío que ya estés bien.
    Un abrazo querido amigo.

    ResponderEliminar
  6. Saltar al vacío impone riesgos que solo la confianza, la amista o el amor pueden hacer que se olviden. Si quien espera tiene el alma noble como la tuya, creo que no pasarà mucho tiempo para que alguien salte en sus brazos.
    Un abrazo.
    Leo

    ResponderEliminar
  7. SOLO SI ESTAS TÚ, ABRIRÉ LOS OJOS...
    HERMOSO QUERIDO PEDRO, ESPERO ESTES YA SANITO, ABRAZOS

    ResponderEliminar
  8. Excelente y reflexivo haiku


    Siempre el vacío
    nos estimula el vértigo
    de no encontrarnos.


    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Salto Pedro, salto de inmediato, porque la vida está diseñada para vivirla, vivirla sin miedo ni falsos temores.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. Yo salto sin reserva alguna...un fuerte abrazo,Pedro

    ResponderEliminar
  11. Sin problema, prepárate que salto...
    Me encanta este Haiku, ¡si confías salta!

    Un besote enorme Pedro.

    ResponderEliminar
  12. Creo que es la unica manera de enfrentar lo desconocido. Muy bueno me gusto, un abrazo hermano!!!

    ResponderEliminar
  13. ¡¡¡Este reto es fantástico!!!

    Saludos

    ResponderEliminar
  14. Si me esperas salto sin pensarlo y hasta con los ojos cerrados, para no verlo, por si errase la caída, jaja. Estupendo haiku, aunque te haga un poco la broma, Pedrito mío. Creo que todos saltaríamos confiados si supiésemos que alguien contendría nuestra caída y eso sería más que maravilloso, ¿verdad?

    ResponderEliminar
  15. Siento que allí estarás para esperarme
    por eso mismo voy a abandonarme.
    Si eres un mar extenso como todo mi ayer
    me dejaré caer.

    ResponderEliminar

A TODOS LOS NAVEGANTES Y NÁUFRAGOS QUE ARRIBAN A PEDRO’S ISLAND

Quien llega a esta Isla, llega exhausto: vapuleado, cuasi-ahogado, confuso; luego de haber navegado o naufragado a contracorriente y de haber escapado las fauces hambrientas del océano inmenso y su profundidad alucinante de cristal, espuma y sombra.

Gracias por tener fe en el horizonte. Gracias por perseverar.

Descansa en estas playas y siente que has llegado, finalmente, a donde perteneces desde siempre. Te ofrezco, en recompensa de viaje y por tu denodado esfuerzo, todos los secretos, la paz y la magia de este paraíso que de este momento en adelante, es también tuyo.

¡Bienvenidos, damas y caballeros, a Pedro’s Island!