
domingo, 17 de enero de 2010
Para ayudar a Haití desde España, a través del blog de Geles Calderón Villamandos

Romance de la musa y el toro

A mi musa y su toro, con mis mejores deseos
Se aman
y los amo
por amarse.
No haya miedos
no haya reservas
no haya dudas
ni entregas a medias.
Ámala
y no estrujes
su corazón
porque es frágil
y perfumada
como un azahar
que de noche desgaja
la exquisita sencillez
de su esencia
de niña-mujer
concebida al galope
de una pasión
que requiere
más cerebro
y paisajes mentales
que penes
y musculaturas
bajo el signo
genital
de la luna ensartada
en taurino ruedo
de astas
untadas de salitre
y sombra...
Tú
entrégate
y dale ternura
que es hombre-niño
necesitado
y hambriento
de un regazo
donde acunar
su colección
de pacientes esperas
y ocultos espejismos
donde eres
virgen
e impúdica sacerdotisa
conjugada en el sincrético
deseo
de una premonición
que te anticipa
pura
decantada
y perfecta
desde la infancia
sin recuerdos
ni memorias
de uterino vestigio
o freudiana pregunta...
Dignidad
y amor
son incompatibles:
se ama de rodillas
desnudos
ante el universo.