Que Melchor, Gaspar y Baltazar les traigan los mejores obsequios de la vida: salud, amor, paz y amistad.
Recuerdo con nostalgia cuánto aguardaba de chico este día en mi Cuba natal, hasta que se le metió entre ceja y ceja a Fidel Castro eliminarlo del calendario oficial y celebrar el Día de los Niños el 14 de junio, acabando así con una tradición legada de España que más que religiosa, era parte hermosísima y mágica de nuestra cultura nacional... Ojalá puedan los niños de Cuba tener de nuevo Día de Reyes en un futuro no lejano.