Dios y yo estamos contigo. ¡Eres invencible!
Vas a ponerte buena
porque así
lo reclama mi entraña.
Eres necesaria
Extremadamente urgente
y necesaria.
Dios necesita
que seas ángel
y musa
en esta batalla
y nos regales
con tu verbo apasionado
con tu refinado
sentido
del golpe de efecto
con tus descripciones
que estimulan la imaginación
con fascinante brío
y ponen de pie
a un ejército de poros
excitados
salivantes
erectos
como toros en celo...
Te pondrás bien
porque así lo decreto:
yo
dios de mi Isla
e hijo del mar
coloso a horcajadas
con pedestal
sobre las viejas sapiencias
de milenario,
astral origen
cultivadas
como prados de magia
sobre los verdes valles de Europa
y las áridas
planicies de África.
Cristal de agua en un vaso,
perfume y canela en rama;
pide luz a La Milagrosa:
en seis días se aleja tu karma.