Para Rosita Fornés, amiga, inspiración, pauta e ídolo de toda una vida, en el día de su cumpleaños.
(Con audio en la voz del autor)
Rosa:
prodigio
que rebasa el tiempo
para llegarnos
fresca
y entrañable
en la regia solidez
de tus cuatrocientos años
confesos
desplegados
como prueba
irrefutable
de tu poder
de extraordinaria permanencia
en el medio
voluble y triunfalista
de todos los vedettismos
que has conquistado
para hacerlos tuyos
y darles
el sello inconfundible
de tu presencia
requerida e irrepetible
en cada canto
en cada gesto
en cada entrega
descolgada de la magia
sabiéndote
única
y premiada
por esa estrella
de tu sino
tan grande y solitaria
como aquella otra
de la bandera:
bandera
tú
por propio derecho
para aquellos
que te amamos
y agradecemos
el diario
milagro
de llevarte
dentro.
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