Quietud en el silencio
de la hora.
Una luz
casi al centro
de la ventana
y oscuridad alrededor
como en una madriguera
carente de ojos.
¿A dónde iré
desde este punto
cero
que de nuevo es
mi vida?
¿Habrá amanecer
en tres días
o tal vez se acabe
el mundo
en una semana?
Las traiciones
y las mordidas
dejan puntadas rojas
en la piel
y en el alma:
costurones
de la vida
que se burla
amarga
de quienes la mastican
y luego
la escupen
porque
no hay
forma
de tragársela.