Vuela la mariposa
sobre el cáliz de la rosa
posándose cadenciosa
como beso que reposa.
No hay duda de que es hermosa
trémula, azull y azarosa
se aleja la mariposa
en pos de una nueva rosa.
Cuando el día que retoza
pone rubor en la rosa
regresa la mariposa
como amante deseosa.
Ya de noche, temblorosa
de muerte ardiendo fogosa
muere, soñando en la rosa:
destino de mariposa.
1 comentario:
Todos tenemos algo de mariposas. Somos frágiles y bellos como ellas. Pena que se nos acabe la magia en cuanto nos quitan el polvo de las alas.
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